Victor toma su mochila y se aproxima al aula de canto, dónde le espera su profesor, Eduardo Villes, que lleva años en la asignatura y es toda una eminencia en la escuela.
[Entra Victor, en silencio, y deja su mochila en el suelo ruidosamente. Su profesor le mira]
Profesor - ¿Qué ocurre, Victor?
Victor - ¿Que qué ocurre? ¡Ja! [entre bufidos] Sevilla es una mierda. El tráfico no está controlado, y tardas en llegar de un sitio a otro muchísimo, aunque entre ellos no haya mayor distancia. Sumado a la pasividad de los sevillanos, que aparentan saberlo todo y son unos inconscientes que no se enteran ni de dónde viven.
[Su profesor se acerca a él con seriedad y le habla]
Profesor - Creo que no tienes un buen día. Pero aún así debes sacarle el máximo provecho a tu vida, sea como sea esta.
Victor - [Entre ironicas risas] Eso es fácil decirlo, pero hacerlo...
Profesor - Bueno, basta. Pongámonos a trabajar de inmediato.
La escena refleja una clase de canto, donde el alumno se dispone a descubrir su voz. Las paredes de madera y el suelo de parque se reflejan en un enorme espejo central.
Profesor - Comienza a entonar, Victor.
[El alumno comienza a entonar una estrofa de "Contradanza". Al rato, su profesor levanta la mano, en ademán de que pare]
Victor - ¿Qué ocurre? Profesor - Tu voz es hueca.
Victor - ¿Qué significa eso?
Profesor - Que necesitarás mucha práctica si quieres valer para esto.
[Victor se sienta en el suelo, con las manos en la cabeza, y suspira. Su profesor le pone una mano en el hombro, como consuelo, y se sienta a su lado]
Victor- Llevo tanto tiempo perdiendo, que no se cuándo me va a tocar ganar. La vida es un plato de cerezas. Hay quienes al tomar una, recogen una cereza roja, sabrosa y dulce. Otros al tomarla, recogen una cereza apagada, casi sin sabor. Otros recogen las más ácidas... Pero si alguien se ha de quedar con la que está podrida, estoy seguro de que esa es la que yo he tomado por error.
Profesor - Pues yo creo que debes pasar de las cerezas y cantar más...
[Victor mira a su profesor y ambos ríen]
Profesor - Vamos... ¿Nunca has escuchado mi lema favorito? Si la vida te da la espalda, tócale el culo.